El agua es una sustancia líquida, indispensable para la vida de todo ser viviente. Este líquido es el que hace posible el buen funcionamiento interno de todos los órganos que componen el cuerpo humano. Por lo tanto, es necesario que el agua forme parte de la ingesta diaria.
De acuerdo, a muchos expertos la cantidad de líquido que requiere una persona oscila entre los 2,5 a 3 litros, de tal forma que el organismo la absorba y procese adecuadamente, mediante una serie de reacciones propias de cada sistema que conforma el cuerpo humano.
Ahora bien, esa cantidad de líquido que ingieren normalmente las personas, no solamente se consigue con el agua pura, también la obtenemos en cada comida que hacemos, en las frutas, en forma de jugo, refrescos entre otros. Así, que no hay que beber una cantidad exagerada de agua, para alcanzar la cantidad de líquido que recomiendan, solo hay que beber la que tu cuerpo pide a través de la sed.
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Por supuesto, no hay que esperar que el cuerpo nos avise, solo hay que tomar cierta cantidad de agua durante el día, que dependerá del tipo de actividad que estés realizando, del clima donde vives y del tiempo. Esto nos indica, que no hay que tomar agua de forma exagerada, porque a lo mejor no lo necesitamos.
Tomar mucha agua, en lugar de favorecer la salud de las personas, puede causar ciertos daños. En el peor de los casos la hiperhidratación, que se da cuando se toma más agua que la que el cuerpo necesite, ocasionando mareos, náuseas y hasta dolor de cabeza. También causa la disminución de los niveles de sodio del cuerpo, provocando que las células crezcan de forma anormal, dañando los órganos y músculos.
Muchas personas toman más agua de lo que deben, así no tengan sed. Esto no es necesario, dado que la cantidad de líquido recomendable la adquieres de otras formas y lo que vas hacer es complementar con agua cuando la requieras, es decir cuando sientas sed.
Conoce los beneficios de beber menos agua
A continuación, te mencionaremos los beneficios de tomar menos agua, sin disminuir la cantidad de líquido.
- Favorece la hidratación que tu cuerpo necesita, sin llegar a la sobrehidratación.
- Regula la eliminación de las toxinas, a través de la orina y el sudor. La transpiración y la eliminación de los desechos se normalizan.
- Regula los niveles de sodio en las células, sin afectar el equilibrio de las reacciones que se producen internamente en el organismo, para que se den los procesos adecuadamente para el buen funcionamiento de todos los sistemas que conforman el cuerpo humano.
- Favorece a la digestión y al metabolismo del cuerpo, facilitando la eliminación de los desechos en cantidades adecuadas.
- Facilita el transporte de los nutrientes hacia todos los órganos del cuerpo, sin llegar a diluirlo más de lo que requiere para su correcta absorción.
- Ayuda a mantener el equilibrio de la temperatura corporal, con la eliminación del líquido a través de la piel en forma de sudor.
Con esta breve información, te podrás dar cuenta que no necesitas tener botellas de agua en tu bolso, llevas la necesaria y tomas cuando tu cerebro te lo indique, es decir si tienes sed. No bebas agua, por beber o porque alguien te dijo que hay que tomar tanta cantidad de agua. Solo ingiere lo que necesites para mantenerte hidratado y saludable.